Pregunta:
Estimados Sres. de Comunión de Gracia,
En sus publicaciones ustedes dicen que Dios ya nos perdonó nuestros pecados pasados, presentes y futuros, y que “no hay pecado que puedas cometer que Dios en Jesucristo no haya perdonado ya».
¿Podrían explicarme entonces cual es el pecado imperdonable mencionado en Mateo 12: 31: “Por eso les digo que a todos se les podrá perdonar todo pecado y toda blasfemia, pero la blasfemia contra el Espíritu no se le perdonará a nadie”?
Martín
Respuesta:
Estimado Martín,
Si he entendido bien su pregunta, usted dice que si Dios, en Cristo, ya ha perdonado todos los pecados, entonces ¿por qué Mateo 12:31 habla de un pecado que «no será perdonado»?
El pecado al que Jesús se está refiriendo aquí es «la blasfemia contra el Espíritu Santo«. Esto se relaciona con los que dicen que están «en contra» de Jesús.
Leamos juntos los versículos 30 y 31: “El que no está de mi parte, está contra mí; y el que conmigo no recoge, esparce. Por eso les digo que a todos se les podrá perdonar todo pecado y toda blasfemia, pero la blasfemia contra el Espíritu no se le perdonará a nadie”.
El punto de Jesús parece ser que una persona que blasfema contra el Espíritu está, en efecto, rechazando a Jesús, quien es la fuente de todo perdón.
Objetivamente, toda la humanidad está «en Cristo» y está perdonada. Pero si una persona (subjetivamente) rechaza esa inclusión en su perdón, rechaza el regalo que ya es suyo – esta persona escoge la separación de la fuente de su vida y su perdón.
Es esta auto elección de la separación lo que constituye el «infierno».
Esa es la razón por la que Robert F. Capón escribe que todas las personas en el cielo serán pecadores perdonados, y todas las personas en el infierno serán también pecadores perdonados. ¿Cuál es entonces la diferencia? Los que están en el cielo abrazaron el perdón que tienen en su unión con Jesús. Los que están en el infierno lo rechazaron.
En Cristo,
Ted Johnston