Juan escribió el libro de Apocalipsis en un estilo literario llamado «apocaliptico», el cual usa imágenes y símbolos fantásticos para describir el juicio de Dios y la victoria sobre el mal. (3 min)
El nombre del libro de Apocalipsis viene de su primer versículo, el cual dice: “la revelación de Jesucristo”. Esta palabra, revelación, es la traducción de la palabra griega apokalypsos, la cual significa “levantar el velo” o “revelación”. Juan escribió este libro en un estilo literario peculiar muy conocido por los judíos y los cristianos primitivos el cual llamamos “estilo apocalíptico”. Este estilo usa imágenes y símbolos épicos y fantásticos para describir el juicio y la victoria de Dios sobre los opresores de su pueblo y sobre todo mal. Éste estilo literario fue muy popular del segundo siglo antes de Cristo hasta finales del primer siglo después de Cristo. Las figuras y símbolos de la literatura apocalíptica no deben ser tomados literalmente, sino que deben entenderse dentro del contexto de tal estilo literario, de manera similar a la forma como interpretaríamos el simbolismo de una caricatura política hoy en día.
Los símbolos de Apocalipsis podrían parecer extraños para los cristianos de los siguientes siglos, y ciertamente han sido un tema de misterio y de debate. Pero Juan usó tales símbolos debido a que eran muy bien entendidos por los cristianos de su tiempo. El libro de Apocalipsis no contenía un código secreto que les permitiría descifrar a los cristianos de generaciones futuras cuando tomaría lugar la segunda venida de Jesucristo. Más bien era un mensaje de esperanza y de ánimo para los cristianos del primer siglo, escrito con el propósito de asegurarles que, a pesar de toda la evidencia que les mostrara lo contrario, Jesucristo ya había obtenido la victoria final sobre todo tirano y sobre toda tiranía.
Aun cuando los cristianos tengan que enfrentar el martirio a manos de los enemigos de Dios, a su debido tiempo los santos serán reivindicados, resucitados de entre los muertos, y reinarán con Cristo. Apocalipsis insta a los fieles a confiar en Cristo, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, y a resistir cualquier tentación a entregar su lealtad a aquellos que se oponen a Dios.
Tal mensaje tiene la misma fuerza fulminante para los cristianos hoy en día. Dondequiera que los déspotas se levanten, dondequiera que domine la tiranía, Dios nos asegura por medio del libro de Apocalipsis que el día de nuestra liberación y nuestra reivindicación está cerca. “Él les enjugará toda lágrima de sus ojos,” nos dice Apocalipsis 21:4. “Ya no habrá muerte, ni llanto, ni lamento ni dolor, porque las primeras cosas han dejado de existir.”
A lo largo de la historia, al enfrentarse a la opresión y a la persecución, los cristianos han encontrado una gran fuente de paz, fe y júbilo en el Apocalipsis de Juan. Este libro conlleva el mismo mensaje hoy en día para aquellos cristianos en diferentes partes del mundo quienes sufren persecución. Debido a que Jesús reina, la historia personal de cada creyente, sin importar lo desolado que su presente parezca, terminará triunfalmente.
Soy Joseph Tkach, hablando de la VIDA.