Primer jueves de adviento – 1 de diciembre 2011
Lo llevó fuera, y le dijo: «Mira al cielo y cuenta las estrellas, si eres capaz de contarlas. Así será tu descendencia.»
Génesis 15:5
A Abraham se le da un regalo de esperanza, la promesa de un futuro. Abraham era viejo, él y Sara no tenían hijos. El regalo de Dios de la esperanza levanta sus ojos hacia las estrellas, para ver en ellas una promesa, una visión de lo que será.
Tómate tiempo hoy… para levantar tus ojos, para ver lo que puede ser, lo que será. Tómate el tiempo para desenvolver el regalo de Dios de la esperanza para ti y el mundo.
Enciende una luz… ora por los que tienen pocas esperanzas, cuyos ojos sólo miran hacia abajo.
Haz tiempo hoy… para llevar esperanza a una persona o situación que encuentres, a través de tus oraciones, tus palabras, o simplemente tu presencia.