Por Carrie Smith
James Egbert es una estrella en ascenso en la industria musical. Si no has oído hablar de él, es posible que hayas escuchado su música, sobre todo si eres un fanático de las películas. Recientemente, el remix de James de la canción «Septiembre», apareció en la película Last Vegas y tuvo el privilegio de asistir a la premier de alfombra roja en Las Vegas. Recientemente tuve la oportunidad de hablar con James, y cuando le pregunté acerca de la película, él se rió y dijo: » Sí, definitivamente tiene ‘Hollywood’ escrito por todas partes, pero fue una oportunidad genial».
Hollywood no es lo que James hace. A lo largo de la entrevista, James se mostró lo más auténtico y real. Él es quien es, y aprecia todo lo que tiene. James, de 25 años, creció en una familia de músicos que alimentó la pasión que él tiene para hacer algo que le encanta y que siempre disfrutó hacer. James dijo que tien la bendición de tener el apoyo de su familia y es especialmente bendecido de contar con el apoyo, el amor y el estímulo de su esposa, Cara.
James es un compositor de música electrónica y DJ y ha estado produciendo música profesionalmente desde hace unos cinco años; tres años produciendo bajo su propio nombre. De sus numerosos lugares de actuación, dice que Red Rocks en Colorado y The Gorge en Washington están entre sus favoritos porque «ambos son anfiteatros naturales y son increíblemente surrealistas debido a su belleza natural». Sólo este verano pasado James tocó en festivales al aire libre en Tomorrowland en Bélgica y en el Festival Emmaboda en Suecia. Si bien gran parte por lo que James es conocido públicamente se ha basado ser disc jockey, su enfoque principal gira en torno a la música que crea personalmente.
Cuando la mayoría de la gente habla de éxito, ellos hablan sobre el futuro, el establecimiento de metas y trabajar para alcanzarlas. Aunque James tiene metas y está trabajando en el cumplimiento de ellas, él mira al éxito un poco diferente. «He encontrado mi mayor éxito cuando miro hacia atrás en mi carrera, y puedo ver que yo fue siempre yo».
Cuando era niño, James estaba constantemente preocupado por ofender a los demás y ser juzgado por los demás, y se preguntó cómo afectaría esto a su carrera. Lo que encontró cuando conoció más gente en el negocio de la música es que la gente era más tolerante de lo que esperaba; que estaban dispuestos a ponerse detrás de alguien que confía y defiende sus creencias. Como parte del equipo de liderazgo en su iglesia local en Denver, esto era importante para James. La aceptación de los demás permite a James ir a todos los espectáculos y presentaciones sabiendo cuál es su posición y sabiendo que no va a transigir. Esta confianza ayuda a James a mantenerse firme en lo que cree y, a menudo, le conduce a la oportunidad de compartir sus creencias con los fans y otros músicos a su alrededor.
Cuando le pregunté a James cómo veía por sí mismo hacer una diferencia en una industria llena de artistas que dan mensajes negativos, subrayó que su deseo es «pasar las buenas cualidades y virtudes» y «ser diferente a otros músicos… especialmente en la atmósfera de la corriente principal, sexo, drogas y rock & roll». «La vida se trata de pedestales,» cree James, «y a todos se nos dan algunos». Lo que es importante, subrayó, es nuestra forma de actuar en nuestro pedestal. James ha decidido utilizar su pedestal para tener un cuidado especial de sus fans. Él quiere tener «más que una conexión de Facebook» con sus fans; él disfruta reunirse con ellos, escuchar sus historias y poner caras a los nombres de Internet.
A través de su música y su carrera, el deseo de James es «simplemente mostrar el amor de Dios y que ellos [los fans y otros en el negocio] lo cuestionen» porque esto le da la oportunidad de verbalizar sus creencias y su pasión cuando habla con ellos en persona. También decide contrarrestar los mensajes negativos enviados por músicos y artistas de hoy sin tener que gritar en voz alta contra ellos. Él simplemente hace «lo que ha sido hecho para hacer» y permite que eso hable mucho.
La confianza de James en ser quien es le ha impulsado a ser más abierto con la gente. Él ya no se preocupa de ofender a otros en las post-fiestas y salidas nocturnas. En lugar de ello, James ha encontrado que está dispuesto a profundizar, a sabiendas de que a medida que las personas van y vienen en la vida, todavía haces un impacto de alguna manera.
Cuando terminamos nuestra conversación, le pregunté a James si tenía algún consejo para los jóvenes que quieren hacer una diferencia en la actualidad. Esto es lo que él comparte:
«La cantidad de presión por la sociedad para vivir en el sexo, las drogas y el rock & roll puede ser una cosa espantosa, sobre todo cuando no estás seguro de lo que eres. Lo que he encontrado más alentador es que a la gente no le importa [sobre su imagen] tanto como tú piensas que les importa. Ellos están más emocionados de ver que tienes una postura firme. La gente está buscando la integridad y si tú realmente pones tu dinero donde está tu boca. Sé quien eres y permite que tus acciones apoyen eso. Párate tan firme como sea posible».
El consejos de James hace eco de las instrucciones de Pablo en 1° Corintios 16:13-14, «Estén en guardia; permanezcan firmes en la fe; sean valientes; sean fuertes. Hagan todo en amor». James habla en voz alta a través de sus acciones, por ser quien fue hecho para ser y hacer lo que él cree que se supone que debe hacer. Creemos que su ejemplo seguirá alentando e inspirando a otros jóvenes artistas a hacer lo mismo. ◊
Para más información sobre James y su música, lo puedes encontrar en Facebook (James Egbert), donde también ofrece enlaces a varios sitios con su música. En noviembre 2013, James lanzó «Exit Wounds«, el primer sencillo de su próximo álbum The Void.
Este artículo fue publicado en la Revista Odisea Cristiana No. 48
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