Es la voluntad del Padre que la humanidad sepa cuánto Él la ama.
El Padre envío al Hijo, el Hijo envió al Espíritu, y el Espíritu ha enviado a la iglesia a proclamar este mensaje.
Es la voluntad del Padre que la humanidad sepa cuánto Él la ama.
El Padre envío al Hijo, el Hijo envió al Espíritu, y el Espíritu ha enviado a la iglesia a proclamar este mensaje.