| Notas de amor para parejas | |||
La mayoría de los matrimonios cristianos experimentan altibajos en su relación con Dios. Muchas veces estos picos y valles no son experimentados al mismo tiempo por ambos cónyuges.
De hecho, la mayoría de las parejas, en algún momento de su matrimonio, estarán en diferentes lugares en su relación con Dios. No todos crecen al mismo ritmo. Hay momentos en que uno de los cónyuges se siente muy cerca de Dios, mientras que el otro cónyuge puede sentirse distante. Si bien esta es una temporada difícil de navegar, al menos, el fundamento de la fe de la pareja es el mismo.
¿Qué se hace cuando uno de los cónyuges sigue a Cristo y el otro cónyuge no?
¿Cómo mejorar tu matrimonio cuando tu cónyuge no comparte tus creencias?
¿Cómo puedes tener un matrimonio que honra a Dios cuando tu cónyuge no tiene una relación con Dios?
Aquí están algunas sugerencias para mejorar tu matrimonio aunque tu cónyuge no comparta tus creencias o tu fe.
1. Escucha compasivamente
Como cristianos nos gusta compartir nuestros puntos de vista; nuestras creencias; nuestras opiniones. Compartimos libremente y con frecuencia. Pero, ¿escuchamos? Escuchar comunica que valoramos lo que el otro tiene que decir. Cuando eliges escuchar a tu cónyuge; su opinión; sus puntos de vista; sus sentimientos, le comunicas que es más importante que tu deseo de «convertirlo(a)». Jesús fue un gran preguntador y escuchador.
2. No fuerces la religión en tu cónyuge
El cristianismo es acerca de la relación, no la religión. Cuando uno de los cónyuges se centra únicamente en la asistencia a la iglesia de su cónyuge o en la lectura de la Biblia o la práctica de otra disciplina espiritual antes de que su cónyuge tenga una relación con Cristo, hacer esas cosas se hace más importantes que la relación. Nadie quiere ser forzado o manipulado en una relación.
3. Comparte la verdad con amor
Muy a menudo los esposos que aman a Dios y aman a su cónyuge, quieren que sepan la verdad de la Palabra de Dios. No es lo que decimos lo que es ofensivo, es la falta de amor con que lo decimos lo que aleja a otros de nuestro mensaje. Es difícil de creer en un Dios que es amor, cuando la verdad que compartimos con los demás está vacía de amor. Comparte la verdad, pero compártela con amor.
4. Ora con tu cónyuge
Muchos esposos y esposas cristianas oran por su cónyuge. Pero ¿qué hay de orar con él/ella? Cuando están estresados… cuando han tenido un mal día… cuando el futuro es incierto… cuando las finanzas están apretadas. En lugar de hacer que tu cónyuge se sienta como un proyecto que necesita la ayuda de tu oración, ora con él/ella. Al orar juntos le estás invitando a tu relación con Dios… no para convertirlo a tu fe, sino para darle un asiento de primera fila a tu relación con Dios.
Navegar por un matrimonio con dos religiones diferentes no fácil, pero es una gran oportunidad de vivir en amor a pesar de las diferencias de opiniones. Es un viaje importante en el que muchas parejas están y han estado. Espero que esta lista te proporcione una nueva perspectiva que te ayude a amar a tu pareja más profundamente a la ves que vives tu fe.
Nos agradaría mucho si pudieras compartir tu experiencia en la sección de comentarios; será de mucha ayuda a otras parejas que puedan estar en tu misma situación.
