Tercer Miércoles de Adviento – 14 de diciembre 2011
Cuando David terminó de hablar con Saúl, el alma de Jonatán quedó ligada al alma de David, y lo amó Jonatán como a sí mismo. 1 Samuel 18:1
Jonatán era hijo del rey Saúl, enemigo jurado de David. Pero él y David estaban unidos en un profundo vínculo de amor y amistad, una amistad que trascendió el odio de Saúl y de su pelea con David.
Tómate tiempo hoy… para reflexionar sobre el don de la amistad en tu vida. ¿Qué te da este regalo?
Enciende una luz… agradece a Dios por tus amigos, por todo lo que la amistad y el amor trae a tu vida y a los demás. Ora por tus amigos en dificultades.
Haz tiempo hoy… para desenvolver el regalo de la amistad. Tal vez puedes hacer algo para renovar o restaurar una relación.