Perdona, Dios mío, lo que hice
en contra de tus leyes más profundas,
locuras, faltas, intenciones,
me pesan como culpas
en el alma.
Perdona pues no supe lo que hacía
y si supe, no supe evitarlas:
me diste cielo, mares y glaciares
continentes me diste, animales,
vegetales, me diste, minerales…
Perdónanos, Tierra, los errores
que hacemos, hicimos y que haremos
perdónanos porque no sabíamos
y ahora que sabemos,
reiteramos.
Mea culpa reconozco por haberte
lastimado, planeta, en tu suelo,
sin respeto talé tus verdes selvas
sin piedad ensucié tus aguas puras
como si fueran sólo mías, derroché
con saña desgasté las fecundas
llanuras, prados y los valles;
las lagunas enturbié , ríos y mares.
Perdona, lirio frágil, dulce trébol,
mea culpa, te ofrezco, bello sauce…
Perdóname zorzal por encerrarte,
por perseguirte, visón, tú me perdonas?
a desaparecer, ballena, te orillamos
por ambición, ignorancia
o locura.
Perdona Señor por ofenderte
pisoteando la vida que nos diste,
lastimando nuestro cuerpo que es tu templo
con comidas que nos sacian,
solamente…
Mea culpa por violar nuestro cerebro
llenando sus espacios con chatarra,
perdona porque hemos mancillado
el alma que nos sirve como puente
entre el yo que perece
lentamente
y el yo que levantas de la muerte.
Perdona por soplar contra la brisa,
por violar los susurros de los vientos,
por apagar el sol, la luz de luna,
por segar la breve espuma,
del mar sobre la arena,
indiferentes.
Mea culpa, cielo y cordillera
pueblos, razas y naciones
por la soberbia de siglos
la humana injusticia,
inhumana;
por segregar, negar la esperanza
al más pobre, al más débil, al caído,
las aves mansas…
Por los que mentimos el libre albedrío
y entregamos al hermano
con un beso,
perdón;
por doblegar al más pequeño
y acallar la conciencia del que es bueno…
por defraudar al que espera el capullo
y confía en la lluvia que lo nutre:
perdón por eso.
Salwa Azzam
(Mendoza, Argentina) |