Y una voz dijo desde el cielo: «Tú eres mi Hijo muy amado, estoy muy complacido contigo». Marcos 1:11
La promesa del arco iris de Dios es amplia y universal. Las palabras de Dios en el bautismo de Cristo son una declaración de deleite personal. Es personal, pero no excluyente. Puesto que todos estamos en Cristo, al escuchar estas palabras nos damos cuenta de la verdad de que todos y cada uno somos hijos de Dios muy amados y apreciados.
- Tómate el tiempo hoy… para escuchar las palabras de Dios a Cristo en su bautismo hablándote a ti y diciéndote «tú eres mi hijo amado, estoy muy complacido contigo»
- Transforma tu vida… ora para que el deleite de Dios sobre ti traiga cambio y fuerza a tu vida.
- Haz tiempo hoy… para vivir consciente del gozo y el placer que Dios siente por ti. ¿Qué puedes hacer hoy para reflejar en tu vida el deleite que Dios siente por ti?